....Y llegó el finde......

Los viernes empiezo a escuchar las enardecidas frases: "¡por fin llegó San Viernes!", "¡qué bien ha llegado el mejor día de la semana!", "¡ya ha llegado el finde!", etc, etc, etc....exultantes, eufóricos esperando la llegada de la noche para obligatoriamente salir de marcha, para obligatoriamente ponerse hasta las cejas de casi todo, y para obligatoriamente llegar a casa cerca de cuando amanece, cosa que se repite con la fiebre del sábado noche. Y es que parece que el que se precie de simpático, guay, enrollao y divertido, debe seguir este ritual cada finde, o cae en la categoría de aburrido, triste, antipático y antiguo. Poco más que un insulso que no sabe vivir, con una vida que no tiene sentido.
Para otros el sábado, día de IKEA y Leroy Merlin. La fiebre de la bricomanía se apodera de nosotros, y nos liamos con las instrucciones imposibles del mueble de turno que hay que armar, y cuidado con perder un tornillo número 8 de los 148 que trae, porque no hay Dios luego que acople el mueble, y nos da por pintar la habitación de invitados en rojo, con lo relajante que es el azul....como si no se pudiera taladrar o pintar entre semana.....
El domingo como posesos al coche, a la montaña, a esquiar, a comer en tal pueblo o a bañarnos en la playa, disfrutando al final estas actividades dos horas escasas de las siete que nos hemos chupao en la cola del remonte, esperando mesa en el restaurante, buscando un sitio para aparcar, y de atascos para ir y venir . Para eso el domingo es día de descanso.
Y yo me pregunto porque no hacemos nada en lugar de dedicarnos a hacer tanto, porqué no hacemos lo que queremos en vez de lo que hace el grupo, porqué no nos dedicamos tiempo de calidad en lugar de perderlo......porqué no somos felices con las cosas sencillas, las pequeñas cosas, las más simples que nos rodean, y tenemos que buscar tanto fuera......

....Y encima luego llega el lunes........