Hacia la vida

Al ser humano le ciegan aparatos por doquier, las cosas, las posesiones, el status social... casi todo el mundo atribuye al dinero el origen del bienestar, de la felicidad, se aspira a una vida buena a través del dinero olvidando la esencia que es aspirar a una buena vida como seres humanos, mejorándonos como personas para lograrla. Olvidándonos de nosotros mismos, de nosotros como personas individuales, con nuestros objetivos propios en esta vida, nuestro caminar singular, para caer en lo fácil del grupo, del seguimiento a otros y de otros caminos, es más confortable y menos cansado siempre caminar en compañía, pero hay trechos que solo podemos y debemos recorrerlos solos, y si queremos encontrar lo que nos depara esa búsqueda, solo alejándonos de moldes, rebaños, etc....llegaremos al final, a lo más alto, esa es la gran aventura de la vida, que lejos de ser algo egoísta, se convierte una vez en el sendero y logrado el objetivo, en algo para compartir con los demás; nada tiene sentido si no se comparte.

La vida es para vivirla, tener fe en uno mismo que la puede vivir, sentirla, adentrarse en ella con valentía, rompiendo moldes, normas, rutinas, avanzando sin quedarse aferrado a nada ni nadie que no lo merezca o que ofrezca mediocridad, no hay que vivir por costumbre hay que vivir por y para un motivo.....cada minuto, cada hora, cada día.......