Contrastes

Una imagen me hizo reflexionar sobre los grandes contrastes en medio de la desolación y el caos.

En el barrio alto de Puerto Príncipe, Haití, el barrio de los ricos, de la clase pudiente, el terremoto también dejó su huella implacable de destrucción, casas unifamiliares con todo lujo de comodidades se veían medio derrumbadas; en una de ellas se veía un matrimonio en su casa bastante dañada, la piscina destrozada, su coche intacto a la entrada, y ella arreglada, bien vestida, adornada con pulseras y collares, limpia, con buen aspecto, y él, médico, vestido informalmente, pero limpio, arreglado, con un corte de pelo impecable, con sus gafas de marca, andando por fuera de la casa mirando alrededor....y yo me pregunté qué hacía él ahí siendo médico en lugar de estar abajo ayudando a su gente cuando dicen que falta personal sanitario.......contrasta la imagen con la parte baja de la ciudad, donde viven los pobres, donde reina la destrucción total, donde vagan miles de personas sin rumbo, sucias, a medio vestir, despeinadas, muchos hasta descalzos, viviendo al intemperie día y noche, con hambre y sed, con mascarillas para camuflar un poco el olor de miles de muertos.....un contraste enorme aún en medio de la destrucción entre arriba y abajo....

la otra imagen, inclasificable, es la de cruceros de lujo que siguen ajenos a la catástrofe fondeando en la parte norte de la isla, en su puerto privado, exclusivo para ellos, para que sus pasajeros bajen a sus playas a pasar el día en sus cristalinas aguas y a tomarse unas margaritas a la sombra de las palmeras y al son de la alegre y festiva música caribeña.....me pregunto cómo no les llegan los ecos lejanos de gritos de dolor, desesperación, sufrimiento, tristeza, muerte.......