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jueves, 13 de octubre de 2011

Otro experimento

Por un lado recortan personal sanitario, ambulatorios, tratamientos y pruebas, y en fármacos todo lo que pueden, y por otro, en unos centros de salud van a poner más personal, en este caso psicólogos para atender a las muchas personas que sufren problemas de ansiedad y depresión en lugar de ser atendidas por el médico de cabecera con pastillas. Y es que los casos de ansiedad y depresión es el doble entre los parados que entre las personas que trabajan, y es que una consulta de 5 minutos con el médico de atención primaria que receta ansiolíticos, antidepresivos y tranquilizantes no soluciona nada, puede reducir los síntomas pero nunca curar el problema, la persona necesita más ser escuchado por un psicólogo que reconduzca su situación, aborde el problema desde la raíz y con diferentes terapias pueda solucionar el problema. Eso, ¿o es más barato para la Sanidad las sesiones de un psicólogo que el costo de fármacos?, porque si antes eran tan reacios a derivar a pacientes a psicólogos siendo estos tratados comúnmente con fármacos, este "repentino descubrimiento" de que un psicólogo es más efectivo para estos casos de ansiedad y depresión, muchos de ellos daños colaterales de la crisis de estos años haciendo que se disparen la cifra de personas que sufren algún trastorno de estos a consecuencia de su estado laboral actual, me hace pensar y dudar. Porque no se necesitan muchas luces para saber que muchisimos casos de ansiedad y depresión requieren de tratamientos psicológicos y no de atiborrarte a pastillas. No sé porqué me da por pensar que esto puede ser un experimento de cifras, de números, y de ahorro. Y algunos experimentos ya estamos viendo como han acabado, por ejemplo la pastilla postcoital, que si empezó de una manera más o menos sanitariamente controlada y supervisada, ahora es un descontrol total, sin receta, sin supervisión médica, y cualquiera yendo a comprarla libremente por la persona que la necesita sin información adecuada de posibles riesgos y demás. Así que ojalá este no sea otro experimento que acabe con las personas necesitadas de ayuda médica como conejillos de indias de la Sanidad.

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