"he creado este blog pensando en un lugar de encuentro de mis palabras con las tuyas, un lugar para hacer un alto y compartir escribiendo y leyendo, un lugar donde las palabras vuelen libres....te invito a que entres, disfrutes, participes...."

martes, 20 de septiembre de 2011

Cosechas infructuosas



¿Se recoge lo que se siembra?.......es un principio que es casi como una ecuación matemática que no debe fallar......pero con los números ya se sabe, a veces se cometen fallos. Bueno, y yo también que siempre he sido de letras y las matemáticas nunca me gustaron ni se me dieron bien. El caso puede ser también que el saco donde recojo mi cosecha puede que tenga un agujero muy grande, o que no tengo precisamente eso de "buena mano" para sembrar.....pero lo que debería ser sencillamente no es. Y veo mucho aridez en mis campos, a veces hasta zonas desérticas y secas, de nada vale el riego, el abono, los fertilizantes.....la tierra no da, no produce, nada crece.....Como en todo, no basta solo con el sembrador, la tierra tiene también que abrirse a recibir y dejarse fecundar, y entonces la cosecha será increíble. Es uno de los principales males, el poco interés, las pocas ganas, la desidia, el cansancio, el esfuerzo, el rechazo, el miedo, a compartir y compartirse. La tierra está bien oculta, en su subsuelo, en su mundo y con lo que conoce y los que conoce, se siente en cierta manera segura así, y cualquier pisada extraña y cualquier semilla ajena hace que se endurezca y que sea impenetrable.

¿Por qué tememos empaparnos en un buen aguacero?

2 comentarios:

Paqui Serrano dijo...

¿Has probado a sembrar por el simple hecho de sembrar, sin esperar recoger nada a cambio?

simply blue dijo...

La semilla siempre queda y silenciosamente hace su trabajo, pero como la tierra, se alimenta de la gratitud, sin importar que los frutos sean los más hermosos, jugosos o frondosos. El solo hecho de saber, de percibir, el cuidado, el amor del otro la hace enormemente agradecida.