Me gusta por no tener pelos en la lengua. Por decir las cosas como son sin importarle nada. Me gusta por no medir las palabras. Por no tener miedo a lo que ellas provoquen. Me gusta porque le da igual sonrojar al más pintado. Porque le gusta decir las cosas y no mirar a otro lado o callar. Me gusta porque si hay que enfrentarse a algo o alguien, no se amedrenta ni recula. Porque no le dan miedo las críticas. Porque es consciente de sus luces y sombras, del riesgo de jugársela en todo lo que hagas en la vida. Me gusta porque no deja de sorprender, y en la vida se trata de eso.
Me gusta porque no le gustan las tibiezas, o la amas o la odias.
Me gusta porque es incorrecta, y me gusta sobre todo que sea mujer.
2 comentarios:
Como no podría ser de otra manera, discrepo contigo en casi todo..
Sí tiene pelos en la lengua.
No siempre dice las cosas como son.
A veces, mira a otro lado y calla.
Otras recula de lo dicho... etc.
No olvides que, además de mujer, es política española :-)
Besos "borroka!
L.
Alguna discrepancia más ya no es novedad, pero yo lejos de que pueda uno estar de acuerdo o no en su gestión que puede gustar o no, como sus ideas, etc... me refería más en la forma de ser, no miro en si es política, miro en que cuando hay que decir ciertas cosas no tiene temor ni anda con tibiezas para decirlas, que no mide mucho, que se arriesga y las dice, que es incorrecta, molesta, que prefiero eso a los ladidos que van de todo lo contrario y con una sonrisa y las mejores formas y palabras, te la están clavando por detrás.
Me quito la txapela para darle un beso D.E.
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