Esta foto la hice visitando la exposición World Press Photo 2011, donde una señora que visitaba la exposición observaba ensimismada y emocionada la fotografía ganadora de este año, el rostro desfigurado de una mujer afgana, Bibi Aisha, a la que la familia de su marido amputó la nariz y las orejas, un retrato hecho por Jodi Bieber. Me llamó la atención la emoción y con la atención que miraba dicha fotografía la señora, y la belleza del retrato, la belleza interior de este rostro es superior a la tristeza que pueda transmitir. El World Press es la cita de foto periodismo de alta calidad por excelencia, la mirada profunda y crítica sobre los conflictos y acontecimientos principales en todo el mundo a lo largo del año. Este año se recibieron 108.059 fotografías tomadas por 5.091 fotógrafos de 125 países. Todas representan la noticia, la crítica, la denuncia, la mirada, la voz, el estudio, de hechos remarcables de este 2010 alrededor del mundo. La tragedia y desolación del terremoto de Haiti, el terremoto en China, las impactantes fotografías de las inundaciones en Pakistán, el caos y la superpoblación de las grandes metrópolis del mundo y su miseria, fotografías de personajes de actualidad, retratos de saharauis viviendo su conflicto en los campos de refugiados, la erupción de un volcán en Java, los asesinatos de personas a manos de los narcos a las afueras de Ciudad Juarez, los enfrentamientos entre "los camisas rojas" y las autoridades en Tailandia, los espeluznantes comercios de carne en Níger, las clínicas de abortos clandestinas en Kenia que ponen los pelos de punta, la serie de una persona seropositiva fotografiada durante 18 años hasta su muerte, la situación en las cárceles en Sierra Leona, la niña nepalesa que sufría hidrocefalia que fue ayudada hasta su muerte, fotos impactantes de naturaleza......estas son algunas de las fotografías, hay muchas más, que se pueden ver en esta magnifica exposición, que me emocionó, me hizo llorar, reflexionar, me dejó exhausta y también me llenó muchisimo; es la humanidad en estado puro y duro, con lo malo y lo bueno. La recomiendo a todo el mundo, no deja indiferente. Es real, cruda, quizás no apta para algún tipo de público al que puede herir su sensibilidad.
Estará en Vitoria hasta el 11 de diciembre, y en Barcelona hasta el 18 de diciembre.
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