Con otro ritmo

La Unesco ha declarado el 30 de abril "Día internacional del jazz". Aunque a mi el jazz siempre me suene a verano. A petición de muchos grandes del género, esta música todavía minoritaria en nuestro pais, a pesar de los múltiplos festivales que por toda la geografía se celebran, es un genero musical de puerta grande y no es solo para unos cuantos, aunque muchos no lo sepan. Sin embargo en España, a pesar de que haya gente educada en el genero y aficionada al jazz, son otros ritmos y gustos los que proliferan. Yo empecé a escuchar jazz en el 1989, y no he parado desde entonces, y he tenido mis más y mis menos con muchos de los que suelen decir que nos les gusta  "porque no entienden el jazz". Tal vez el jazz sea además también cosa de personalidad, carácter y forma de ser. Quizás se debería fomentar más a nivel general en este país todos estos festivales, conciertos, actuaciones, garitos, cantantes, grupos, etc...más apoyo por parte de a quien corresponda a estos "otros" géneros y esta música, y que la gente descubra este sonido único, fascinante, seductor, embriagador, como la suave lluvia que moja la piel y penetra, como una imponente fuerte tormenta que a pesar que asusta, más te gusta.  Sentimiento y emoción. Libertad. Espontaneidad y creatividad. Dejarse llevar, dejarse seducir, sentir, emocionarse, y expresarse. Todo esto y más te da el jazz.

Dedicado a L  (la canción también ) con la que tengo algo pendiente.

No paramos de follar

Según un estudio hecho a 29.000 personas en 36 países diferentes, los problemas económicos y la situación actual que estamos sufriendo, no ha hecho que hayamos perdido el deseo por el sexo. Y es que el sexo según los encuestados en nuestro país, nos hace sentir de buen humor, estar de mejor ánimo,  menos estresados, con más energía, etc.. y el 75%  dice estar satisfecho por su vida sexual, y el 80% nada más y nada menos, dice que sus parejas son buenas en proporcionarles placer sexual, haciendo de España un país muy por encima de la media mundial. Con lo cual yo me pregunto dónde estará ese 75% de satisfechos, llenos de buen humor y animo y cargados de energía, y el 80% que está feliz de la vida con sus buenas parejas en el arte amatorio, porque yo lo que veo por la calle es mucho cabreo, tristeza, desánimo y desilusión. Así que a mi que me lo expliquen donde está toda esa gente que no para de follar ni con la crisis, llenas de optimismo, relajadas, de buen humor, colmadas de felicidad y a rebosar de energía. En fin, que hay mucho cuento chino, y como siempre, vamos por la vida pretendiendo ir sobrados de todo. Hasta de follar.

La felicidad en una mandarina

Yo que estaba pensando apuntarme en un curso de meditación o yoga, para gestionar mis pensamientos, emociones, sentimientos, equilibrar mi mundo interior, encontrar la armonía,  etc....y resulta que todo está una mandarina. Puffff.....y la de mandarinas que habré comido. Nos llega la meditación "mindfulness" algo así como "la atención plena" a través de una mandarina, con el movimiento "Wake up", o sea "Despierta". Y el "Wake up" dice que hay que instalarse completamente en el momento presente, y el primer paso es contemplar con atención todos los quehaceres del día a día en el que estamos implicados, como lavarse los dientes o las cosas de casa, contemplarlas y dedicarles tiempo y dedicación, como por ejemplo el comer, una acción que hacemos deprisa y corriendo sin fijarnos, que queremos hacer rápido para dedicarnos a otras cosas. Y por eso es que esta corriente integra las mandarinas en su filosofía. Para que paremos y aprendamos a conectar con las cosas. Por medio de los sentidos, tocaremos esa mandarina, la oleremos, la saborearemos....tiempo para observar, y para meditar, sobre lo que comemos, la cantidad que comemos, cómo comemos.....y sobre la vida misma. Y es que una mandarina te puede hablar, solo por ponerte en contacto con ella, y hacerte pensar, dedicar un tiempo a pensar. Aislarte de ruidos, del mundo que nos rodea, y meditar con una mandarina. Simple. Tan simple que nunca se me hubiera ocurrido, pero ahora ya se que haré cuando la próxima vez muy lentamente toque a la mandarina, la huela, coma sus gajos muy despacito....parar y frenarse, y ver y sentir todas las emociones, aquí y ahora....y meditar ......

Pausa para reír

Cuando más estamos con el agua al cuello, a punto de ahogarnos en esta crisis de la que parece que nos vamos a salir nunca ni que nunca va a terminar.... estaría bien al modo de Gila llamar a la crisis y decirle que si puede parar un rato......más que nada para recomponernos un poquito y seguir tirando pa´lante con nuestras vidas. Porque esto se está llevando demasiados trabajos, esfuerzos, sueños, ilusiones, ganas, alegría, y sonrisas por el camino. Arrasando como una bomba tirada que se lleva todo por delante. La gente está triste, amargada, rota. Como en un pozo, como en un túnel sin salida. Y es especialmente triste y desgarrador ver a personas, que llegada su vejez por situaciones varias a la que los ha llevado esta crisis, se encuentran sin casa, sin comida, sin nadie que los ayude. Después de toda una vida luchando, de esfuerzos y sacrificios, que te encuentres así al borde de la miseria, que tú vida se desmorone de tal manera. Estaría bien que la crisis parara por un rato, nos diera una tregua, y nos dejara seguir con nuestras vidas. Y estaría sobretodo muy bien, que nos diéramos una tregua para reír también, que nos hace falta, nos alegra la vida, nos produce felicidad, y es el motor para seguir adelante a pesar de todo. Que no nos la quiten jamás.

Elogio a la ineptitud

Me levanto temprano esperando un paquete por DHL que me llega hoy. Pueden venir de 8 de la mañana (ni de coña vendrán a esa hora, ¡já!) a 2 de la tarde. A las 11:45 llamo a DHL para asegurarme. ¡Sorpresa!, el número de expedición que les doy no corresponde a DHL, y tampoco les sale ningún envío para hoy al código postal que les doy. Llamo a la empresa que me envía el paquete y me dicen que si, que les sale un envío para mi hoy, les digo lo que me dice DHL, y me dicen que espere un momento que van a hablar con ellos....(musiquita d.l.c. de fondo)...vuelve la persona y me dice que si, que DHL me lo traerá hoy pero que no pueden decir a qué hora, será "durante el día"....vuelvo a llamar a DHL para asegurarme que será hoy y no el lunes, y lo mismo, que a ellos no les aparece nada. Ya un poco cabreadita vuelvo a llamar a la empresa, (siempre hablas con alguien diferente con lo cual tienes que contar toda la historia de nuevo), y les digo que a DHL no le sale nada y que el número que ellos me dan de expedición no corresponde a DHL, que su número es de 10 dígitos, y me dice la tía pues que quite los dos últimos dígitos del número que me ha dado y que se lo de así a DHL, con dos c. hala. Vuelvo a llamar a DHL, y que tampoco quitando los dos últimos digitos les sale algo. En la página web de la empresa donde he comprado el articulo hay una sección de chat online para cualquier problema, así que cliqueo ahí. Escribo el problema en la pantallita de chat y me contesta la persona en la pantallita del chat, que lo siente, que para ese problema tengo que llamar al teléfono de atención al cliente. Noto que se me acelera el corazón por instantes. Le digo a la persona de la pantallita del chat que ya lo he hecho, que es inútil que me dicen una cosa y DHL otra, me dice que lo siente pero que ese tipo de problemas es directamente con atención al cliente y no con ellos en el chat. Le digo que para que es este chat entonces, y me dice que para ayudar a navegar por su web, con dos c. otra vez. Como si se necesitara una licenciatura para navegar por una página web. Le digo que muy bien, que haciendo gastar al cliente dinero en llamadas a un número 902. Se le encienden las luces y me dice que si le puedo dar algún número de teléfono de contacto. Se lo doy y me llama una persona a mi móvil. Vuelvo a explicarles todo el rollo otra vez, y me dice que el día que hice el pedido, ese día se cayó el sistema informático ¡¡¡¡¡¡EN TODA EUROPA!!!, así tan pancha con dos cojones; yo ya no sabía si reír o llorar, si coger el ordenador e incrustarlo en la pared, y menos mal que los aparatos de teléfono ya no tienen cables, porque me hubiera ahorcado con el, y que al otro lado la persona en cuestión oyera mi último aliento y le quedara por siempre en la conciencia. Bueno, aquí sigo sin ahorcarme, oyéndola. Me dice que el número que ellos me han dado lo dan con más cifras siempre para que luego los de DHL "quiten algunos", bueno, de mearse lo de esta gente. Y yo, pues nada, así al libre albedrío, pues que quiten los de delante y el último. Y ellos que si, que el pedido me llegará hoy, palabrita de honor; y que a una mala debido al desbarajuste MUNDIAL informático, pues el lunes. Vuelvo a llamar a DHL, y nada, que ni quitando los dos primeros números y el último les salía nada, con lo cual le digo que es cuestión de suerte, que quitando y poniendo igual damos en el clavo, y la tía no pudo más que descojonarse. Y ya con el cachondeito se animó y siguió a la desesperada cambiando números, buscando por nombres, etc....hasta que por fin encontró mi pedido, y que efectivamente me llegará hoy....hasta las 8 de tarde pueden venir en cualquier momento. Espero.

(to be continued......porque me da que hoy, nada....)

El otro perdón

Yo hubiera preferido que ETA hubiera pedido perdón, por tantos crímenes, por tanto daño, por tanto dolor. Por tantos años de miedo, por tantas infancias robadas, por tantas familias destrozadas, por tanta alegría arrancada a cuajo, por tantos sueños rotos. Por el desprecio e intolerancia sobre los que no son como ellos, no piensan como ellos, por los que han echado de su tierra por no entrar por el aro, por el odio y la venganza hacia el resto de españoles y España, por los años de violencia y sufrimiento que ha afectado a todo un país, por la paz robada. Yo hubiera preferido que hubiera salido en la televisión un etarra y hubiera dicho: "lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir". Vivir sin ese perdón a ellos mismos, es lo peor, junto con la cárcel, lo que les puede pasar en su vida. Yo hubiera preferido que estos mal nacidos por una vez en su vida, hubieran tenido un acto digno y justo hacia todas esas familias víctimas de su barbarie demencial con el arrepentimiento y el perdón. Yo hubiera preferido que las voces de todos se alzaran contra los asesinos de seres humanos inocentes y exijieran que definitivamente abandonen la violencia, entreguen las armas, y nos dejen vivir en paz sin miedos sin concesiones. Y hubiera preferido que lo hicieran a cara descubierta, no como cobardes siempre encapuchados, dando la cara, aceptando sus errores y equivocaciones, y pidiendo perdón, que es lo único que puede traer la paz y resarcir definitivamente a esas familia y a la sociedad.

B&B&B

Hoy cocinando este rico plato, patatas y costillas, me he acordado de lo mucho que nos ha gustado siempre y lo mucho que se ha cocinado. Cocina tradicional, de familia, de siempre. Cocina sabrosa, llena de alimento, socorrida, y barata. La de toda la vida. Cuando mirábamos el bolsillo, ajustábamos la cesta de la compra, etc...pero de ahí pasamos a la cesta de la compra a rebosar y a desbordarse. Olvidamos en cuanto pudimos un poco aquello que se hacía antes para economizar sin dejar de alimentarse bien, y nos entregamos a nuevas cocinas, nuevos y carisimos productos, a los siempre carisimos alimentos de toda la vida, al derroche culinario día si y día también, buenos vinos, dietas diferentes cada vez, etc....y por ahí se nos va un tubo. Es tiempo otra vez de volver a los orígenes, a cocinar y alimentarnos con cabeza, y como diría Arguiñano, con fundamento, sobre todo en los tiempos que corren. Volver a la cocina y los platos buenos, bonitos y baratos.

Siempre en lo malo hay algo bueno.

Cuando éramos muchos

Se habla de aumentar un 20% más de alumnos por aula, en aulas que ahora oscilan en 25 en primaria y 3o en secundaria. Y yo recuerdo cuando en mi clase éramos 40, cuando había tres grupos por curso, grupo A, B y C, de 40 alumnos cada uno. Como nos sentaban por orden alfabético, yo ser el número 38 por ejemplo. Como a los revoltosos a veces el profesor o profesora los solían poner en primera fila. Como el profesor ponía a algún alumno aventajado con otro que le costaba más para que lo ayudase. Como teníamos más clases, y pasábamos más horas en el colegio. Y de ahí salieron médicos, abogados, ingenieros, profesores, arquitectos, artistas, etc......como ahora. La masificación en las aulas hace que el profesor tenga que trabajar más, y según los que se oponen, esto hará que empeore la calidad de la enseñanza. Y la calidad de la enseñanza mejora, en mi opinión, por un conjunto de cosas y no por la cantidad de más o menos alumnos por aula. Por ejemplo, por poner algunas cosas, por tener una educación única en toda la geografía, y no en función de cada autonomía, lo que crea diferencias entre otras cosas, y desestabiliza a los niños que tengan que vivir en diferentes etapas de su vida en una comunidad u otra por el empleo de sus padres. Por un sistema educativo que no cambie cada dos por tres en función del partido político que gobierne. Por profesores competitivos, y es que la competición, que es sana y buena, marca el esfuerzo y la excelencia, y los profesores que sean funcionarios no; y ojo, que con esto no quiero decir que no hay también buenos profesores funcionarios. Por un sistema que valore al profesorado, lo tenga motivado, y que continuamente fomente un aprendizaje extra y de reciclaje en su profesión. Por una educación, que fomente en los niños desde pequeños el esfuerzo, el trabajo, el estudio, y no que con tantas suspendidas de todas formas se pasa, que fomente el valor de las cosas, desde las mesas y sillas donde se sientan, los libros, los ordenadores,etc...y el respeto hacia el colegio, los profesores, y los demás alumnos y compañeros. Hay que empezar a reeplantearse esta educación que a la vista está no está dando frutos, y que hace que nuestros alumnos estén a la cola de Europa, y no tanto de que se pase de 25 alumnos a 30, o de 30 a 36.

Siempre a flote

Como todo en la vida, las etapas, sucesos, difíciles, malos, negativos, sirven para algo. Sobre todo para darnos un toque de atención a nosotros mismos y nuestra vida. A veces vamos con el piloto automático puesto todo el rato, y es bueno también coger el timón a veces. Y enfrentarse a tormentas, olas, marejadas fuertes, truenos y rayos. Porque después de la tormenta siempre viene la calma. Y no está del todo mal a veces esos meneos en nuestro barco que nos hacen parar, reflexionar, ese punto de inflexión quizás necesario. En esta crisis todos lo hemos hecho. Esto nos ha servido tal vez para saber priorizar, focalizar, economizar, inventar, y reinventarse. Es quizás una de la mayores aptitudes del ser humano, caer y volver a levantarse, adaptarse y sobreponerse a las dificultades y problemas, vencer adversidades y contratiempos y salir fortalecidos de ellos. No dejar que se hunda el barco y seguir siempre a flote. Y no está mal ajustarse bien la vida para que como los pantalones no caigan, no dejaremos por ello de estar alegres, aprenderemos incluso lo dichosos que somos por cuanto tenemos y por lo que nos sobra, y que lo que nos falta no es necesario.

¿Dónde quedaron los sueños?

Muchos jóvenes se sienten atrapados en un momento en el que su vida es en función del mes a mes. Con contratos de tres meses, seis meses, un año con suerte.....sin saber qué va a pasar después. Con muchas horas de estudio, preparación, carreras, y prácticamente sin salida, estancados y malgastando los mejores de la juventud. Cuando te comes el mundo y no dejas de planear, soñar, querer empezar proyectos.....Viven el día a día con incertidumbre, pensando que no mereció la pena, que ellos no pensaban ni querían esto. Así se siente mucha de nuestra juventud, y si nuestra juventud no sueña esto se va a pique, porque son los sueños, las ilusiones y las ganas lo que cambia, crea, fascina, revoluciona todo. Tanto talento y tantas ganas no se pueden desperdiciar, ellos son el futuro, y en lo que se debe apostar. ¿De qué vale por poner solo un ejemplo, seguir en países en conflictos, en guerras que no son nuestras, gastando tantos miles de millones?....si ese dinero se destinara por ejemplo en crear empleo para los jóvenes, en la investigación, etc...

Les han roto los sueños. Pero los sueños se reconstruyen.

¡Pare que yo me bajo!

Todavía en pleno siglo XXI seguimos con los prejuicios, la exclusión, y la intolerancia. Y más en países supuestamente abiertos, plurales y tolerantes. La aceptación y normalidad hacia el "diferente"es cada vez más difícil. Nos regimos por patrones aprendidos y heredados cerrados, donde lo "normal", lo "bueno" y lo "malo" lo establecen unos, o la sociedad, desde hace mucho, precisamente cuando más presumimos de ser tolerantes, abiertos, y plurales. Supongo que es algo como cuando se daban las parejas o matrimonios de distinta raza, que se les miraba y murmuraba, y tampoco acababan por ser aceptados, y no muy lejos, en la década de los sesenta y setenta. Hoy por suerte, es algo ya más aceptado con normalidad las parejas y matrimonios de diferentes razas, el pensamiento ha ido evolucionando, la gente viaja muchisimo y conocen otras culturas, y a nuestro país han venido a vivir muchas personas de otras razas y culturas, y el amor no entiende de colores. Supongo por tanto que es cuestión de tiempo, y de que el pensamiento evolucione, y la homosexualidad sea tratada con normalidad, sin distinciones y hacer más diferencias, sin tanto orgullo gay. Porque el ser gay no necesita de una carroza y plumas, sino de que la sociedad los mire y trate como un igual, que no tengan que identificarse e identificarlos la sociedad como gays o lesbianas, y que lo que haga cada uno en su cama a nadie le importa. Pues aún en el siglo XXI en países avanzados como Inglaterra cierta gente piensa que la homosexualidad es una enfermedad y que puede curarse, y nada más y nada menos pretendían anunciarlo así en los famosos autobuses londinenses, con dos c. El alcalde de la ciudad ha salido rápidamente y ha prohibido tal campaña publicitaria en dichos autobuses, aunque yo lo que prohibiría además son a esa gente que está detrás de dicha campaña. Esos pensamientos e ideas más que ofensivos para los homosexuales, son deplorables, penosos, e impresentables para la humanidad. Por eso yo me bajo de este autobús que no conduce a ningún lado.

¡No sin mi móvil!

Si preguntáramos en una encuesta la mayoría de españoles están en contra de pagar por algo; se ha instalado en la sociedad el concepto de "todo gratis", y de ahí no sacas a la gente. Es como si mereciéramos no pagar por nada, y que el Estado pague. Y eso no hay país que lo aguante. Nos quejamos por que sube el transporte, y no miramos que los gastos y el mantenimiento es mayor a medida que pasan los años, y que otros países europeos por ejemplo el transporte les cuesta a los usuarios mucho más que aquí. Nos oponemos a pagar un mínimo copago en sanidad, y no los parados, rentas mínimas o jubilados, sino aquellos que trabajan y aquellos otros con rentas superiores. Y no nos detenemos a pensar que como siga así el tema a lo mejor un día vamos a tener que recurrir a seguros privados de sanidad porque nuestra sanidad gratuita se fue al carajo. Y así en todo, pirateamos internet, bajamos música y pelis, nos colamos en el metro y autobús, queremos las aplicaciones del móvil todas gratis, entradas a museos, monumentos, etc...siempre gratis.....todo gratis, todos gratis, todo gratis....y eso conlleva que ni le demos valor a las cosas, ni nos esforcemos por conseguirlas, ni las cuidemos y respetemos. Sin embargo cuando llega el apartado móvil, ahí no nos importa dejarnos parte del sueldo en el móvil de última generación y más nuevo, porque todo el mundo tiene móvil, somos uno de los países con más lineas de telefonía móvil ¡del mundo!, y desde los doce años los niños ya tienen su propio móvil, y en la familia todos tienen móvil. Ahí no pensamos que debe ser gratis, ni nos quejamos, ni hacemos manifestaciones, no nos importa pagar, y le damos valor, nos esforzamos por conseguirlo, y lo cuidamos. Porque el bolsillo propio duele, pero el ajeno nos da igual. ¿Cómo es posible qué paguemos dinerales por un móvil sin rechistar y por un pequeño copago de 10 euros, por poner un ejemplo, nos rasguemos las vestiduras y armemos tal pollo?, ¿acaso no es nuestra salud lo más importante?, ¿por qué le damos más, y tanto, valor a lo material?

Y parte de que nos vaya tan mal es porque nos acostumbramos a no pagar por nada como si este fuera el país más rico del mundo. Y así nos va.

¿Qué nos hace felices?

Se ha celebrado el II Congreso Internacional de la Felicidad. Y supongo que en estos tiempos de incertidumbre, nervios, ansiedad, tristeza, etc...viene muy a cuento. La situación actual que nos rodea, el día a día, etc....no contribuyen para nada a que seamos o nos sintamos felices, sin embargo hay algo muy cierto, y es que la felicidad está en nosotros y en todas partes. En cualquier pequeña cosa o en cualquier pequeño momento, desde contemplar un amanecer, el cielo, el mar, las flores, la grandiosidad de la naturaleza, reír, sonreír, abrazar, besar, escuchar, leer un libro, compartir con los amigos, la familia, practicando la solidaridad, la empatía, pasear, soñar, cultivarse, educarse, agradecer, ser amable, amar, ser amado, darse a los demás, compartir con los otros.....sentir y disfrutar lo que somos y en todo lo que hagamos, con alegría, amor y generosidad. La felicidad como todo hay que ejercitarla todos los días o terminará por atrofiarse para siempre, y lejos de pensar solo en lograr la felicidad personal, se puede llegar a ella precisamente por medio de los demás con amor y dándose. Todo esto si contribuye a que nos sintamos y seamos más felices. Tenemos que desaprender muchas cosas, heredadas, adquiridas, impuestas, y aprender que la busca de la felicidad es el camino que tenemos delante que muchas veces no vemos yendonos por otro.

Sentirnos y ser felices puede ser más fácil de lo que nos imaginamos.

El dolor y la felicidad

Semana Santa. Cargada de devoción, recogimiento, oración. Simbolizada con la pasión, el dolor y sufrimiento. Días y momentos de reflexión especialmente para los cristianos. Y sobre todo para el perdón; todos llevamos en alguna medida esa cruz, más grande o más pequeña, que nos produce dolor. Y es el ejercicio del perdón, uno de los que posiblemente más no llene de paz, serenidad y descanso, y contribuya al estado de bienestar y felicidad personal. Es curioso como dos sentimientos, estados o palabras tan contrarias pueden estar tan asociadas, y cómo se pueden experimentar a la vez en cualquier instante. E instantes son los que conforman la felicidad. La que está en cualquier cosa, por pequeña que sea, que se disfruta. La grande que nos llena de cariño y amor. La que nos abraza y nos da calor y confort a pesar de que no sea un día de frío invierno. La que perdura en el corazón y en la mente para siempre. Y eso es la felicidad ni más ni menos, eso me decía mi corazón estos días. La emoción que sientes, la sonrisa de gratitud y amor, el sentimiento de paz y bienestar, la certeza en el interior. Y cuando hay certeza todo está bien. La tuve hace años, y la sigo teniendo ahora, quizás más que nunca. Y eso es la felicidad.

Dedicado a R.

Primavera y verano

"EN LO MÁS PROFUNDO DEL INVIERNO, AL FIN APRENDÍ QUE DENTRO DE MÍ HAY UN VERANO INVENCIBLE"

Albert Camus

Qué más puedo decir de esta frase que ya lo dice todo. Se puede aplicar a muchos momentos y estados de nosotros. Muchos lo hemos pasado, por no decir practicamente todos, y algunos aún lo pasarán. Y descubres que es cierto, que ya no solo una primavera floreciente, sino un verano cálido nos inunda, que todo es un ciclo, y que los ciclos tienen un principio y un fin, y vuelven a empezar. Las estaciones están en nosotros, y a veces solo hay que tener paciencia para que llegue una u otra, cada una con sus cosas, sin pretender que sea una eterna primavera y un largo verano. Dejemos ahora que empiecen a florecer esas semillas, esos bulbos, sintiendo, disfrutando y saboreando el momento, experimentando la alegría, el optimismo, el humor, la risa que nos trae el momento, para un verano invencible. Porque dentro de todos hay un verano invencible.

Los violentos

Siguiendo con la ira y violencia reinante de estos días, otro ejemplo más. Unos energúmenos aficionados Osasunistas insultan a un padre y sus dos hijos por llevar puesta una camiseta del Real Madrid y por portar una bandera de dicho equipo. Animo a ver los vídeos de La sexta y Cuatro donde varios de estos descerebrados al ver a estas personas van hasta donde se encuentran sentados y sin importarles que de unos niños se trata, los insultan, los intimidan, y les arrebatan con violencia la bandera que portaban. Esto es el reflejo de el odio acumulado en este país de unos con otros, de regiones con otras, de unos idiomas con otros, de razas y nacionalidades con otras, de ideologías con otras....el país de las diferencias....el país que presume de tolerancia cuando todo es un cuento chino, el país que presume de democracia y pluralidad, y es mentira, porque siguen las imposiciones y las intolerancias, porque quieren mandar unos cuantos e imponer sus ideas a base de violencia.....este es el lamentable espectáculo que se ve en nuestras calles y televisiones de unos cuantos impresentables que nos quieren meter miedo por ser diferentes, por hablar diferente, por pensar diferente, por opinar diferente.....eso son las dictaduras y nacionalismos. Basta ya de esta gentuza que destruye y no aporta nada positivo a la sociedad y a la convivencia, basta ya de mirar hacia otro lado por parte de la sociedad y por parte de los que tienen que tomar cartas en el asunto, solo cabe el rechazo por parte de todos unidos para acabar con estos parásitos y esta lacra.